Los cilindros hidráulicos generar fuerza lineal y el movimiento de presión del fluido hidráulico. La mayoría de los cilindros son de doble acción, ya que la presión hidráulica puede aplicarse ya sea al pistón o al extremo del vástago del cilindro para generar fuerza de extensión o de retracción respectivamente. Estos cilindros se utilizan en muchas aplicaciones mecánicas dondequiera que se necesiten fuerzas lineales elevadas. Con un motor hidráulico relativamente pequeño, un cilindro grande puede generar decenas de toneladas de fuerza, debido a la capacidad mecánica de ganancia casi ilimitada y a la estabilidad inherente de los sistemas hidráulicos.

Partes del cilindro hidráulico

Los cilindros hidráulicos cuentan con un cilindro tubular liso y perforado, un pistón que se mueve libremente con varias juntas de polímero, un vástago de pistón redondo altamente pulido y un cojinete de soporte del vástago acompañados de varias juntas bien ajustadas para sellar la barra deslizante de donde sale el cilindro. La parte superior del cilindro, así como el extremo del vástago de pistón tienen accesorios de horquilla que permiten el movimiento angular del dispositivo que está conectado al cilindro. Cada extremo del cilindro tiene una abertura de conexión roscada o de compresión, donde los tubos de presión hidráulica están conectados de la válvula de control del cilindro.

Operación del cilindro

Cuando el mango de la válvula de control se mueve hacia la posición extender del cilindro, al fluido hidráulico a alta presión, usualmente de 500 libras a miles de libras por pulgada cuadrada se le permite fluir desde la bomba hidráulica hasta el lado del cilindro, mientras que al aceite debajo del pistón en el lado del vástago del cilindro se le permite fluir desde el cilindro y de vuelta hasta el depósito. Si el mango es empujado a la posición retraer, el aceite presurizado se envía al lado del vástago del cilindro, retrayéndolo y empujando el aceite a la parte superior del pistón y de vuelta al depósito.

Descripción del sistema

Un típico sistema emplea cilindros hidráulicos para llevar a cabo el trabajo que requiere grandes fuerzas, tales como una pala excavadora hidráulica utilizada para realizar la excavación de las construcciones, consta de la bomba hidráulica accionada por el motor, el depósito de aceite, refrigeración y filtración, los controles del operador, las tuberías y los cilindros hidráulicos.

Ganancia hidráulica

Esto proporciona una fuerza de salida mucho mayor desde el cilindro que la fuerza aplicada por el motor, aunque a una velocidad proporcionalmente inferior. En el caso de los gatos hidráulicos, los martillos y las prensas, este es exactamente el objetivo de utilizar cilindros hidráulicos, toneladas de fuerza disponibles a una velocidad lenta o moderada de pulgadas por minuto.

Aplicaciones comunes

Los cilindros hidráulicos se utilizan en prácticamente todos los tipos de equipos de construcción, incluyendo excavadoras, topadoras, palas traseras, grúas y moto niveladoras. En los edificios, los ascensores hidráulicos usan grandes cilindros telescópicos compuestos. Los grandes contenedores de basura usan cilindros hidráulicos sobre arietes mecánicos para compactar la basura. En el sector automotriz y del transporte, los frenos hidráulicos de tambor y las pinzas para frenos de disco cuentan con cilindros hidráulicos. En la industria, los montacargas y los gatos son ampliamente utilizados.

Aplicaciones domésticas

Los cortadores de leña utilizan arietes de cilindro hidráulico para dividir las cuerdas de leña para el invierno sin tener necesidad de torcerte la espalda blandiendo un mazo.