Muchas casas antiguas todavía usan una caja de fusibles para desviar la electricidad a través del hogar. A diferencia de un disyuntor que se resetea cuando la luz se corta en una habitación, los fusibles deben reemplazarse. El tipo de fusible más común en uso actualmente es el de vidrio enroscable. Estos fusibles vienen en diferentes amperajes etiquetados en el mismo. Cambia un fusible eléctrico del hogar por uno del mismo amperaje y tamaño que el viejo. Aún hay disponibles fusibles de vidrio de repuesto en los centros de mejoramiento de hogares.

Apaga todos los dispositivos eléctricos de la habitación controlada por el fusible. Esto previene que se produzca un pico de tensión al momento de reemplazar el fusible.

Abre la caja del panel de fusibles eléctricos y apaga el interruptor principal. Este usualmente está en la porción superior de la caja y controla la energía de la misma. Muchas cajas tienen un interruptor que se quita completamente de la caja de los fusibles.

Busca el fusible quemado en la caja del panel, usando tu linterna para ver los fusibles. La puerta de la caja del panel tiene etiquetas que indican qué fusible controla qué habitación. Si esta información no está en la puerta, busca marcas de quemazón o vidrios oscuros en los fusibles.

Gira el fusible fallado en el sentido contrario al de las agujas del reloj con tus dedos para quitarlo de la caja. Coloca el nuevo en la caja de fusibles hasta que esté firme al tacto.

Levanta el interruptor principal de la parte interior de la caja de fusibles. Enchufa los dispositivos eléctricos de la habitación que el fusible controla.