Algunos de los motores que Honda hizo antes de 1998 eran motores VTEC de alto rendimiento, y otros no. Sin importar el tipo de motor, los que son anteriores a 1998 solían utilizar válvulas de recirculación de gasolina (EGR, por "exhaust gas recirculation") de operación electrónica. Para estos motores, e incluso para otros más viejos de Honda (de 1990 o 1991, por ejemplo) que utilizaban válvulas de operación mecánica, el ensamblaje de la válvula EGR puede limpiarse. Esto es necesario cuando las válvulas se pegan. Sin embargo, debes limpiar la válvula EGR cuando comienzas a notar problemas de reposo o de titubeo durante la aceleración, antes de que la válvula comience a corroerse.

Abre el capó del vehículo y quita la válvula EGR. La ubicación exacta del múltiple de admisión puede variar levemente, dependiendo del modelo y del año del auto; sin embargo, los motores Honda tendrán una válvula EGR montada sobre el múltiple de escape. Desconecta el conector eléctrico, si es que hay, y quita los pernos de montaje. Además, quita la manguera de goma que se conecta a la válvula. Para válvulas operadas mecánicamente, simplemente desconecta la manguera que se conecta a la válvula y desajusta los pernos de montaje.

Quita la válvula e inviértela.

Rocía la abertura de la válvula con limpiador de carburador (para quitar la acumulación de carbono dentro de la válvula, que hace que ésta se pegue, lo que puede ser especialmente cierto si el motor de tu vehículo ha sido modificado de algún modo, o si el vehículo tiene una mezcla rica por problemas de sincronización).

Deja que la válvula se asiente con limpiador de carburador dentro suyo por varios minutos y luego vacíala. Si la válvula EGR está realmente sucia, puede que debas dejarla asentar por toda la noche.

Limpia la abertura de la válvula con un cepillo limpiador pequeño para caños y con limpiador de carburadores, luego limpia la válvula con un trapo.

Reinstala la válvula EGR cuando esté completamente seca. La instalación se hace invirtiendo el proceso de remoción.