Los motores de los vehículos obtienen energía al quemar combustible. Cuando hay agua mezclada en tu combustible, tu auto o camioneta no funcionará tan bien como debería, ya que el agua no hace combustión, por lo tanto no se quemará. El agua en tu gasolina puede causar problemas significativos para tu vehículo y causar costosas reparaciones, así que es importante manejar apropiadamente esta situación si sospechas que tu auto tiene un tanque de gasolina defectuoso. En algunas circunstancias, puede ser necesario hacer que una bomba mecánica extraiga el combustible defectuoso manualmente, en vez de dejar que el auto funcione con esta gasolina contaminada.

Etanol y agua

Casi toda la gasolina vendida en Estados Unidos contiene etanol, que es un químico a base de alcohol agregado al combustible para ayudar a reducir la contaminación y conservar los recursos de éste. Sin embargo, el etanol contiene agua y, si hay suficiente agua en tu combustible, el etanol y el agua se separarán de la gasolina y se asentarán en el fondo del tanque. Tu auto no puede funcionar con esta mezcla y experimentará serios problemas de motor cuando esta sustancia llegue a éste.

Funcionamiento pobre

Una pequeña cantidad de agua en la gasolina de tu vehículo afectará la calidad de la mezcla del combustible. Si tu motor está recibiendo dosis intermitentes de agua no combustible junto con la gasolina, empezará a escupir, chisporrotear en incluso dejará de funcionar. Por fortuna, un tratamiento o aditivo en el combustible pueden solucionar este problema.

Economía de combustible ineficiente

Los autos no funcionan con agua. Si tu vehículo tiene agua mezclada con su combustible, requerirá más gasolina real para seguir funcionando y contrarrestar el agua. Si tu auto tiene un tanque con un 95 por ciento de gasolina y 5 por ciento de agua, experimentará por lo menos un 5 por ciento de disminución en la economía de combustible para ese tanque. Esto ocurre debido a que hay un 5 por ciento de fluido dentro del tanque que esencialmente es inútil, si no directamente nocivo.