El carbono acumulado en la válvula EGR de tu Toyota afecta al desempeño del motor, e incluso incrementa el consumo de combustible. Después de algunos años de uso, todavía puedes restaurar el funcionamiento de la válvula quitando y limpiando los pasajes obstruidos del interior de la misma, y conectando el tubo colector de escape para restablecer la buena operatividad del motor. Sigue los pasos que verás a continuación para quitar, limpiar y reinstalar la válvula EGR de tu automóvil. El procedimiento descrito puede ser aplicado en válvulas de vacío EGR.

Estaciona tu Toyota en un lugar seguro, con suficiente espacio para trabajar alrededor de la parte frontal del vehículo.

Abre el capó y asegúrate de que el motor o de que los componentes del mismo estén lo suficientemente fríos al tacto, para evitar quemaduras en tu piel y otras heridas.

Localiza la válvula EGR en el interior del motor; en general, la encontrarás en el lado del conductor. La mayoría de las válvulas se parecen a un hongo de metal y tienen entre 2 y 3 pulgadas (5 y 7,5 cm) de diámetro. Desconecta la manguera de vacío, a mano, de la parte superior de la válvula.

Quita el tubo conectado al final de la válvula usando una llave inglesa, o una llave inglesa corrediza. Extrae los dos tornillos de montaje de la válvula usando también una llave inglesa o una llave de tubo.

Levanta la válvula hacia afuera del compartimiento del motor y desecha la junta de la misma. De ser necesario, utiliza una rasqueta de plástico para quitar cualquier material restante de la junta que haya quedado en la superficie de la válvula o del motor.

Limpia el fondo de la válvula y los depósitos de entrada del carbono usando un cepillo de alambre y una lezna o una herramienta similar. Ten cuidado de no rayar o dañar la superficie de montado de la válvula para evitar pérdidas en el tubo de escape de gas. Da golpecitos al cuerpo de la misma para quitar depósitos de carbón sueltos. Si el modelo de válvula EGR de tu Toyota puede ser desmontado, asegúrate de alinear perfectamente las partes cuando la vuelvas a ensamblarla. También limpia el tubo colector de escape.

Pon la válvula limpia en su lugar en el interior del motor con una nueva junta e instala los dos pernos de montaje a mano. Pon en funcionamiento, a mano, la tuerca del tubo de escape para evitar que se dañe. Ajusta los pernos de montaje y la tuerca del tubo. Conecta la manguera de vacío a la parte superior de la válvula.

Advertencias

Es posible usar solvente para limpiar los depósitos de carbón del interior de la válvula, pero deberías tener cuidado de evitar que éste llegue al diafragma de la válvula, o el componente podría arruinarse.